La Diputación de Valencia se encuentra en una situación de parálisis una semana después de la dimisión de su presidente, Vicente Mazón. La falta de un candidato claro por parte del Partido Popular para sucederle ha dejado el futuro de la institución en manos de Vox, mientras la Agencia Valenciana Antifraude inicia una investigación sobre la gestión de los bomberos durante la DANA.
Este bloqueo institucional se produce en un momento crítico, con la provincia recuperándose de los efectos del temporal y con cientos de ciudadanos exigiendo responsabilidades en las calles.
Puntos Clave
- El Partido Popular sigue sin presentar un candidato para presidir la Diputación de Valencia una semana después de la renuncia de Vicente Mazón.
- Vox tiene la capacidad de decidir la sucesión, pero las negociaciones están estancadas por tensiones internas.
- La Agencia Antifraude ha abierto una investigación sobre el pago de 60.000 horas extra a los bomberos provinciales durante la DANA.
- Cientos de personas se han manifestado en València para exigir que Mazón asuma responsabilidades judiciales por la gestión de la catástrofe.
Un vacío de poder en un momento crítico
La dimisión de Vicente Mazón como presidente de la Diputación de Valencia ha abierto una profunda crisis de gobernabilidad. Siete días después de su renuncia, el Partido Popular, la fuerza mayoritaria, todavía no ha propuesto un nombre para ocupar el cargo, lo que ha generado una notable incertidumbre política.
La situación ha transferido el poder de decisión a su socio de gobierno, Vox. Según ha revelado el negociador del partido, la falta de un candidato del PP impide cualquier avance. Esta parálisis llega en el peor momento posible, cuando la provincia necesita un liderazgo firme para coordinar las labores de recuperación tras la DANA.
El papel de Vox en la sucesión
Con los escaños actuales, el voto de Vox es indispensable para que el PP mantenga la presidencia de la Diputación. La formación política ha expresado su disposición a negociar, pero ha dejado claro que no aceptará cualquier candidato y que la falta de una propuesta formal por parte del PP es el principal obstáculo.
Tensiones internas y una sucesión bloqueada
El bloqueo no solo se debe a la falta de consenso externo, sino también a fuertes tensiones dentro del propio equipo de gobierno. Fuentes internas señalan que, tras la salida de Mazón, surgieron intentos de apartar a su círculo de confianza, con voces que pedían una renovación completa del equipo.
Esta pugna interna, descrita por algunos como un intento de "purga", ha complicado la búsqueda de un candidato de consenso que pueda ser aceptado tanto por las diferentes facciones del PP como por Vox. La frase "hay que echarlos a todos", atribuida a sectores críticos con el equipo saliente, refleja la magnitud del conflicto.
Mientras tanto, la gestión diaria de la institución provincial se ve afectada, ralentizando la toma de decisiones cruciales para los municipios afectados por las inundaciones.
Antifraude investiga 60.000 horas extra de los bomberos
A la crisis política se suma ahora un frente judicial. La Agencia Valenciana Antifraude ha iniciado una investigación de oficio para esclarecer las circunstancias que rodearon la realización de 60.000 horas extraordinarias por parte del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia durante la emergencia de la DANA.
El foco de la investigación está en determinar si esta acumulación masiva de horas extra se debió a una falta estructural de personal en el cuerpo de bomberos. La agencia analizará si la falta de efectivos obligó a recurrir a esta medida excepcional, lo que podría evidenciar deficiencias en la planificación y gestión de los recursos de emergencia de la Diputación.
Datos de la investigación
- Organismo: Agencia Valenciana Antifraude.
- Objeto: 60.000 horas extraordinarias pagadas a bomberos.
- Motivo: Posible falta de efectivos estructural en el Consorcio Provincial.
- Contexto: Actuaciones durante la DANA de finales de octubre de 2024.
Este expediente añade presión sobre la administración provincial, ya que los resultados podrían tener consecuencias tanto administrativas como políticas para los responsables de la gestión del consorcio.
La presión ciudadana aumenta en las calles
El malestar por la gestión de la crisis no se limita a los despachos. Este fin de semana, cientos de personas se concentraron en València para exigir responsabilidades directas a Vicente Mazón. Convocados por diversas plataformas ciudadanas, los manifestantes pidieron que el expresidente "responda ante la justicia" por las decisiones tomadas antes y durante la catástrofe.
"No estamos aquí solo para lamentarnos, sino para exigir que se depuren responsabilidades al más alto nivel. La falta de previsión tuvo consecuencias devastadoras y alguien tiene que responder por ello", declaró uno de los portavoces de la concentración.
La protesta refleja un sentimiento creciente entre la población afectada, que considera que la dimisión política no es suficiente. Los ciudadanos reclaman una investigación judicial exhaustiva para esclarecer si hubo negligencia en la gestión de la alerta meteorológica y en la respuesta posterior al desastre.
La combinación de un vacío de poder, luchas internas, una investigación por presunta mala gestión y una ciudadanía movilizada dibuja un panorama complejo para la Diputación de Valencia, cuyo futuro inmediato sigue siendo una incógnita.





