El empresario Víctor de Aldama, figura central en la investigación del 'caso Koldo', ha afirmado que el exministro de Transportes, José Luis Ábalos, utilizó dinero no declarado para adquirir un local comercial situado bajo su vivienda en Valencia. Aldama sostiene que posee documentación que respalda sus afirmaciones, la cual ya ha sido presentada ante el Tribunal Supremo.
La acusación detalla una operación inmobiliaria donde una parte significativa del pago se habría realizado en efectivo para eludir el control fiscal, añadiendo una nueva dimensión al caso que investiga presuntas comisiones irregulares en la compra de material sanitario durante la pandemia.
Puntos Clave
- Víctor de Aldama acusa a José Luis Ábalos de pagar parte de un local en Valencia con dinero en efectivo no declarado.
- El empresario afirma tener un contrato que fija el precio inicial en 110.000 euros, aunque la escritura final fue por 90.000 euros.
- Según Aldama, solo se registró un cheque bancario de 50.000 euros en la transacción inicial.
- La documentación que supuestamente prueba estos hechos ha sido entregada al Tribunal Supremo.
La operación inmobiliaria en el punto de mira
Las declaraciones de Víctor de Aldama, realizadas durante una entrevista televisiva, se centran en la compra de un local de aproximadamente 174 metros cuadrados. Este inmueble se encuentra en los bajos del mismo edificio donde José Luis Ábalos tiene su residencia en la ciudad de Valencia.
Según el relato del empresario, el acuerdo de compraventa original establecía un precio total de 110.000 euros. Sin embargo, Aldama asegura que de esa cantidad, solo quedó constancia de un pago oficial mediante un cheque bancario por valor de 50.000 euros.
Cambios en el contrato y pagos en efectivo
Aldama explicó que, posteriormente, se modificaron las condiciones de la operación. "Yo tengo el contrato definitivo que nos mandan a nosotros hacerlo (...) Que son 90.000 euros al final por lo que se termina escriturando y es el definitivo", señaló.
Es en la diferencia entre las cifras donde Aldama sitúa el presunto pago con dinero negro. Insistió en que la diferencia de 20.000 euros entre el precio inicial acordado (110.000 euros) y el valor final escriturado (90.000 euros) se abonó en efectivo.
Cifras de la transacción según Aldama
- Precio inicial acordado: 110.000 €
- Pago registrado con cheque: 50.000 €
- Valor final en escritura: 90.000 €
- Presunto pago en dinero negro: Aldama afirma que una "gran parte" se pagó en efectivo.
Estas afirmaciones apuntan a una posible ocultación de parte del valor real de la transacción, una práctica utilizada para evadir el pago de impuestos correspondientes.
Documentación aportada al Tribunal Supremo
La defensa de Víctor de Aldama ha elevado al Tribunal Supremo la documentación que, según su versión, acredita estas irregularidades. Se trata del contrato original que, en sus palabras, detalla "muy claramente" el precio de 110.000 euros y el pago parcial con cheque.
"La Unidad Central Operativa (UCO) incautó el contrato donde se detalla muy claramente un precio de 110.000 euros por ese local y en el que solo se registra un cheque bancario de 50.000 euros", declaró Aldama.
La presentación de estas pruebas ante el alto tribunal busca dar solidez a sus acusaciones y podría abrir una nueva línea de investigación dentro del ya complejo 'caso Koldo'. Los investigadores deberán ahora analizar la autenticidad y el contenido de dichos documentos para determinar su relevancia en la causa.
El 'Caso Koldo' y su alcance
El 'caso Koldo' investiga una presunta trama de corrupción centrada en la adjudicación de contratos para la compra de mascarillas durante los primeros meses de la pandemia de COVID-19. La investigación se extiende a varios ministerios y comunidades autónomas. Víctor de Aldama es considerado por los investigadores como el presunto "conseguidor" de la trama, mientras que Koldo García, exasesor de Ábalos, da nombre al caso.
Más allá del local: comisiones millonarias
Las acusaciones de Aldama no se limitan a esta operación inmobiliaria en Valencia. Durante su declaración como imputado ante el juez del Tribunal Supremo, el empresario fue más allá, dibujando un esquema de comisiones mucho más amplio.
Aseguró que se pagaron entre 3,5 y 4 millones de euros en comisiones ilegales a cambio de la adjudicación de contratos de obras públicas. Según su testimonio, estas supuestas "mordidas" se repartían entre varios actores clave.
Aldama implicó directamente al exministro José Luis Ábalos, a su exasesor Koldo García y también señaló al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) como beneficiario de parte de estos fondos. Estas graves afirmaciones están siendo investigadas por el tribunal para esclarecer la veracidad de las mismas y el destino final del dinero.
La conexión de estas presuntas comisiones con la compra del local en Valencia es una de las claves que los investigadores tratarán de desentrañar. El caso sigue abierto y estas nuevas revelaciones podrían suponer un giro significativo en el procedimiento judicial que afecta a la cúpula del Ministerio de Transportes durante la etapa de Ábalos.





