El Ayuntamiento de València ha finalizado la asignación de un millón de euros en subvenciones destinadas a impulsar la innovación en la ciudad. Un total de once empresas y entidades han sido seleccionadas para recibir financiación, mientras que otras 37 iniciativas, a pesar de haber superado la evaluación técnica, han quedado sin fondos debido a limitaciones presupuestarias.
Las ayudas, enmarcadas en el programa Plaza Innovación, buscan fortalecer el ecosistema tecnológico local apoyando soluciones en áreas estratégicas como la inteligencia artificial, la salud digital y la sostenibilidad. Cada proyecto seleccionado recibirá una cantidad que oscila entre los 89.000 y los 91.000 euros.
Puntos Clave
- El Ayuntamiento de València ha concedido un millón de euros a 11 proyectos de innovación.
- 37 proyectos que cumplían los requisitos técnicos no han recibido financiación por falta de presupuesto.
- Las ayudas se centran en sectores como la IA, salud digital, sostenibilidad y gestión de emergencias.
- Los beneficiarios tienen hasta junio de 2026 para ejecutar y justificar sus proyectos.
- La alta demanda evidencia el dinamismo del ecosistema innovador valenciano y la necesidad de mayor inversión.
Una apuesta por la tecnología de vanguardia
La selección de los proyectos beneficiarios se basó en una rigurosa evaluación técnica. Los criterios valorados incluyeron la calidad de la propuesta, su viabilidad económica y el grado de madurez tecnológica. También se consideró el impacto social y ambiental, así como su alineación con los objetivos estratégicos de la ciudad de València.
La creación de empleo cualificado y el potencial de escalabilidad de las soluciones fueron factores determinantes en la decisión final. El objetivo es claro: apoyar iniciativas que no solo resuelvan problemas actuales, sino que también contribuyan al crecimiento económico y al posicionamiento de València como un referente en innovación.
¿Qué es Plaza Innovación?
Plaza Innovación es una iniciativa del Ayuntamiento de València gestionada a través del centro de innovación Las Naves. Su misión es fomentar el desarrollo de soluciones tecnológicas que aborden los desafíos urbanos y mejoren la calidad de vida de los ciudadanos, conectando a startups, empresas, universidades y centros de investigación.
Proyectos que transformarán la ciudad
Los once proyectos seleccionados abarcan un amplio espectro de aplicaciones tecnológicas, desde la gestión de emergencias hasta la medicina personalizada y la protección del medio ambiente. Estas iniciativas destacan por su enfoque innovador y su potencial para generar un impacto positivo tangible.
Salud y bienestar en el punto de mira
Varios proyectos se centran en el sector sanitario. La Fundación para la Investigación del Hospital La Fe desarrollará un sistema biométrico inteligente para identificar a recién nacidos mediante sus huellas plantares, una medida que busca aumentar la seguridad en los hospitales.
Por otro lado, Ajax Biosciences trabaja en la creación de gemelos digitales biológicos, una tecnología que promete revolucionar los tratamientos médicos al permitir simulaciones personalizadas. En la misma línea, Kenko Imalytics implementará una secuencia ultrarrápida en su plataforma de análisis de imagen médica basada en inteligencia artificial, agilizando los diagnósticos.
El envejecimiento activo también recibe atención gracias a Active Ageing Association, que propone un sistema de acompañamiento virtual con IA generativa para mejorar la autonomía y el bienestar de las personas mayores.
Un dato revelador
Por cada proyecto financiado, casi cuatro proyectos igualmente cualificados quedaron fuera. La proporción de 37 iniciativas sin fondos frente a 11 seleccionadas subraya la alta competencia y la necesidad de ampliar los recursos destinados a la innovación en la ciudad.
Tecnología para emergencias y sostenibilidad
La resiliencia urbana es otro de los pilares de esta convocatoria. Valyra Aerospace desarrollará drones especializados para actuar en emergencias urbanas y operaciones de rescate, mientras que la Universitat Politècnica de València (UPV) aplicará nuevas tecnologías en drones para la gestión de emergencias y la resiliencia ambiental.
La protección de uno de los tesoros naturales de València, L'Albufera, es el objetivo de Fibsen Monitorizaciones. Su proyecto utilizará sensores ópticos para detectar la contaminación del agua y proteger tanto el ecosistema como la agricultura local.
En el ámbito de las comunicaciones, Synaptyx Communication Networks propone redes de emergencia que se autoconfiguran mediante inteligencia artificial, garantizando la conectividad en situaciones críticas.
La cara B: 37 proyectos innovadores en lista de espera
Aunque la selección de los once proyectos es una noticia positiva para el ecosistema, la realidad es que 37 propuestas que también superaron el umbral técnico de calidad se quedaron sin financiación. Esta situación pone de manifiesto una brecha entre la capacidad innovadora de la ciudad y los recursos públicos disponibles para apoyarla.
Entre los proyectos que no obtuvieron subvención se encontraban ideas con un gran potencial para mejorar la vida urbana. Flash Park, por ejemplo, planteaba un sistema de sensorización para optimizar el aparcamiento en la ciudad, un problema que afecta a miles de conductores diariamente.
También quedaron fuera iniciativas como la de Bluenest by Globalvia, centrada en infraestructuras inteligentes para la movilidad aérea urbana (los conocidos como 'taxis voladores'), y la de Aitister, que aplica la IA al diseño generativo para la industria. Empresas consolidadas como Pavasal, Robotnik o Idai Nature tampoco lograron acceder a las ayudas para sus proyectos de I+D.
"La elevada cantidad de proyectos de alta calidad que no han podido ser financiados evidencia tanto el dinamismo del ecosistema innovador valenciano como la necesidad de incrementar la inversión para no perder oportunidades estratégicas", comenta un analista del sector tecnológico local.
El futuro de la innovación en València
Los proyectos financiados tienen ahora hasta junio de 2026 para ejecutar sus planes y justificar los resultados. Se espera que estas iniciativas no solo desarrollen con éxito sus tecnologías, sino que también generen empleo de alta cualificación y atraigan nuevo talento a la ciudad.
El desafío para la administración es claro: encontrar fórmulas para ampliar el presupuesto destinado a la innovación. El hecho de que casi el 80% de los proyectos calificados quedaran sin fondos es una señal de alerta. Si València aspira a consolidarse como un hub tecnológico de referencia en Europa, deberá asegurar que las buenas ideas no se queden en un cajón por falta de apoyo en sus fases iniciales.
El éxito de esta convocatoria demuestra que la materia prima —el talento y las ideas— existe. Ahora, el reto es construir una estructura de financiación pública y privada lo suficientemente robusta para que todo ese potencial se transforme en crecimiento económico y bienestar social para la ciudad.





