Un trágico suceso ha conmocionado al barrio de Campanar, en València, donde un niño de tan solo dos años ha fallecido a causa de un atragantamiento. El incidente ocurrió en la tarde del pasado martes en un parque de la zona, un espacio de juego que se convirtió en el escenario de una fatalidad.
El menor se atragantó con un fruto seco, al parecer un anacardo, que le fue ofrecido por otro niño de mayor edad. A pesar de la rápida intervención de los servicios de emergencia y su posterior traslado al hospital, no se pudo hacer nada por salvar su vida.
Puntos Clave
- Un niño de dos años falleció el pasado martes 11 de noviembre en València.
- La causa de la muerte fue un atragantamiento con un anacardo en un parque del barrio de Campanar.
- Los servicios del SAMU realizaron maniobras de reanimación y lo trasladaron al Hospital La Fe.
- El fallecimiento se confirmó en el centro hospitalario horas después del suceso.
Cronología de un suceso fatal
Los hechos se desarrollaron sobre las 17:00 horas del martes, un momento del día en que muchos parques se llenan de familias y niños. Según las informaciones recabadas, el pequeño de dos años se encontraba jugando cuando otro niño, de más edad, le ofreció un anacardo. En un instante, lo que era un gesto inocente derivó en una emergencia crítica.
El fruto seco obstruyó las vías respiratorias del niño, provocando una situación de asfixia inmediata. Los presentes alertaron rápidamente a los servicios de emergencia a través del teléfono 112, activando el protocolo para este tipo de incidentes.
La respuesta de los servicios de emergencia
Una unidad del Servicio de Ayuda Médica Urgente (SAMU) se desplazó con celeridad hasta el parque de Campanar. Al llegar, el equipo médico encontró al niño en una situación crítica y comenzó a aplicarle las maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) avanzadas para intentar estabilizarlo.
Tras los primeros auxilios en el lugar, el pequeño fue trasladado de urgencia a la unidad de pediatría del Hospital Universitari i Politècnic La Fe de València. A pesar de los esfuerzos continuos del personal sanitario durante el traslado y a su llegada al centro, su estado era irreversible. Poco antes de las 19:00 horas, apenas dos horas después del incidente, se certificó su fallecimiento.
El impacto en la comunidad
La noticia ha generado una profunda conmoción en el barrio de Campanar y en toda la ciudad de València. La pérdida de una vida tan joven en circunstancias tan fortuitas ha provocado una ola de tristeza y solidaridad con la familia del pequeño. Este tipo de sucesos recuerda la fragilidad de la infancia y la importancia de la prevención.
El peligro oculto de los frutos secos en niños
Este trágico evento pone de relieve un riesgo conocido pero a menudo subestimado: el peligro de atragantamiento en niños pequeños, especialmente con frutos secos y otros alimentos de pequeño tamaño y consistencia dura. Los pediatras y expertos en seguridad infantil insisten constantemente en la necesidad de supervisar a los menores mientras comen.
Datos sobre el atragantamiento infantil
El atragantamiento es una de las principales causas de muerte accidental en niños menores de tres años. Sus vías respiratorias son más estrechas y su capacidad para masticar y tragar alimentos sólidos todavía está en desarrollo, lo que aumenta significativamente el riesgo.
Los especialistas recomiendan evitar por completo el consumo de frutos secos enteros en niños menores de cinco años. En su lugar, se pueden ofrecer molidos o en forma de cremas para evitar que puedan ser aspirados accidentalmente.
Alimentos con alto riesgo de asfixia
Además de los frutos secos, existen otros alimentos que presentan un riesgo elevado para los más pequeños. Es fundamental conocerlos para poder prevenir accidentes.
- Frutos secos enteros: cacahuetes, anacardos, almendras, nueces.
- Caramelos duros y pegajosos: pueden obstruir completamente la vía aérea.
- Uvas y tomates cherry enteros: siempre deben cortarse a lo largo.
- Salchichas: deben cortarse en trozos pequeños y longitudinales, nunca en rodajas.
- Palomitas de maíz: su forma irregular y su textura ligera las hacen peligrosas.
- Trozos grandes de carne o queso.
Cómo actuar ante un atragantamiento
Saber cómo reaccionar en una situación de atragantamiento puede marcar la diferencia. Lo primero es mantener la calma y evaluar la situación. Si el niño tose con fuerza, es una buena señal; significa que la obstrucción es parcial y hay que animarle a seguir tosiendo sin intervenir.
"La prevención es la herramienta más importante. Los padres y cuidadores deben conocer los alimentos de riesgo y las técnicas básicas de primeros auxilios. Un segundo puede cambiarlo todo", señala un profesional de emergencias sanitarias.
Si el niño no puede respirar, toser o emitir sonidos, la obstrucción es completa y se debe actuar de inmediato. El primer paso es llamar al 112 y, mientras llega la ayuda, aplicar la maniobra de Heimlich, adaptada para niños pequeños.
La maniobra de Heimlich en niños mayores de un año
- Arrodíllese detrás del niño: Rodéelo con sus brazos por la cintura.
- Forme un puño: Coloque el puño con el pulgar hacia dentro, justo por encima del ombligo y por debajo de las costillas.
- Sujete el puño con la otra mano: Realice compresiones rápidas y ascendentes, hacia adentro y hacia arriba.
- Continúe hasta que el objeto sea expulsado o hasta que el niño pierda el conocimiento, momento en el que se debe iniciar la RCP.
Este trágico suceso en Campanar sirve como un doloroso recordatorio de la importancia de la vigilancia y la prevención para garantizar la seguridad de los más vulnerables en entornos cotidianos como un parque infantil.





