Un hombre ha sido condenado a tres años y medio de prisión tras confesar su participación en un violento asalto a una vivienda en el barrio de Nou Moles, en Valencia. El suceso tuvo lugar la noche del 2 de diciembre de 2023, cuando el condenado y dos cómplices irrumpieron en un piso donde se encontraba una pareja con sus dos sobrinos menores de edad, a quienes amenazaron con pistolas.
Puntos Clave
- Un hombre recibe una condena de tres años y medio de cárcel por robo con violencia e intimidación.
- Los asaltantes utilizaron pistolas para amenazar a una familia, incluyendo a dos niños de 7 y 10 años.
- La confesión del acusado y la reparación parcial del daño redujeron la pena solicitada de seis años.
- Otros dos implicados en el robo, un hombre y una mujer, continúan sin ser identificados.
El asalto en el barrio de Nou Moles
Los hechos ocurrieron sobre las 21:30 horas del 2 de diciembre de 2023. Según ha quedado probado en el juicio celebrado en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Valencia, el plan fue ejecutado por tres personas: el ahora condenado, otro hombre y una mujer. El grupo actuó de forma coordinada para acceder al domicilio.
La mujer se hizo pasar por una vecina para que los inquilinos abrieran la puerta. En ese momento, los dos hombres entraron por la fuerza, iniciando un episodio de gran violencia para los residentes. En el interior de la vivienda se encontraban una pareja y sus dos sobrinos, un niño de diez años y una niña de siete.
Amenazas con armas de fuego
Una vez dentro, uno de los asaltantes, que llevaba el rostro cubierto con un pasamontañas, encañonó a los adultos con una pistola. Obligaron a la mujer a sentarse en el sofá junto a los menores, mientras el ahora condenado se apoderaba de los cuatro teléfonos móviles que estaban sobre la mesa del comedor.
Posteriormente, el condenado llevó al hombre a las habitaciones exigiéndole la entrega de dinero y joyas. Ante la negativa de la víctima, el asaltante le propinó un fuerte golpe en la cara. La mujer también fue agredida por el otro ladrón por hablar en un tono de voz que consideró demasiado alto.
Una estrategia para ganar la confianza
El método de hacerse pasar por un vecino es una táctica utilizada por algunos delincuentes para que las víctimas bajen la guardia y abran la puerta sin sospechar. Esta estrategia anula las medidas de seguridad básicas y permite un acceso rápido y por sorpresa a la vivienda.
Un botín valorado en más de 2.600 euros
Durante el asalto, los ladrones sustrajeron numerosos objetos de valor y dinero en efectivo. El botín incluía diversas joyas de oro, como una alianza, tres cadenas y dos pulseras. También se llevaron los cuatro teléfonos móviles y un reloj.
El valor total de los objetos robados fue tasado pericialmente en 2.024 euros. Además, los asaltantes se apoderaron de 600 euros en efectivo que la familia guardaba en la casa. Antes de abandonar el domicilio, los delincuentes amenazaron a la familia, advirtiéndoles de que volverían si denunciaban los hechos a la policía.
Detalle del material sustraído
- Joyas de oro: 2.024 euros
- Dinero en efectivo: 600 euros
- Otros objetos: 4 teléfonos móviles y un reloj
El juicio y la reducción de la condena
El único detenido por estos hechos confesó su participación durante el juicio. Este reconocimiento fue clave para que el tribunal le aplicara la atenuante de confesión, lo que permitió una reducción considerable de la pena. La Fiscalía solicitaba inicialmente una condena de seis años de prisión.
"Los asaltantes amenazaron a sus víctimas, diciéndoles que volverían a por ellos si les denunciaban o se movían".
Además de la confesión, el acusado se benefició de otras dos circunstancias atenuantes. Por un lado, el tribunal apreció una atenuante analógica de drogadicción, al considerar probada su dependencia a las drogas en el momento de cometer el delito. Por otro, se tuvo en cuenta la reparación parcial del daño, ya que el condenado consignó 1.000 euros antes del juicio para indemnizar a las víctimas.
La sentencia final
La sentencia, dictada en firme tras el acuerdo de conformidad, establece una pena de tres años y medio de cárcel por un delito de robo con violencia e intimidación en casa habitada y dos delitos leves de lesiones. Se aplicaron las agravantes de reincidencia, ya que tenía una condena previa de 2018 por hechos similares, y de abuso de superioridad.
En cuanto a la responsabilidad civil, deberá indemnizar a las víctimas con un total de 2.624 euros por los objetos robados, de los que ya ha abonado 1.000. El resto lo pagará en mensualidades de cien euros. También deberá pagar otros 225 euros por las lesiones causadas y una multa de 300 euros.
A día de hoy, los otros dos participantes en el asalto, el hombre que ocultaba su rostro y la mujer que llamó a la puerta, continúan en paradero desconocido y no han sido identificados por las fuerzas de seguridad.




