Un total de 37 personas dependientes, usuarias del servicio de teleasistencia de la Generalitat Valenciana, perdieron la vida durante la DANA que afectó a la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre. Esta cifra representa cerca del 16% de las 229 víctimas mortales confirmadas a causa de las inundaciones.
La información fue proporcionada por la vicepresidenta y consejera de Servicios Sociales, Susana Camarero, en una respuesta parlamentaria al grupo socialista en Les Corts Valencianes. El gobierno valenciano asegura que se emitieron avisos de precaución a los usuarios antes y durante la catástrofe.
Puntos Clave
- 37 de las 229 víctimas mortales de la DANA eran usuarios del servicio de teleasistencia de la Generalitat.
- La vicepresidenta Susana Camarero confirmó el dato en una respuesta parlamentaria.
- El gobierno afirma que se emitieron avisos de precaución los días 28 y 29 de octubre.
- Los registros de llamadas de esos días no contienen referencias explícitas a una alerta meteorológica, aunque la Conselleria explica que se comunicaron verbalmente.
- Más de la mitad de los fallecidos en la DANA tenían 70 años o más, siendo un grupo especialmente vulnerable.
La respuesta oficial del Consell
La vicepresidenta segunda del Consell, Susana Camarero, detalló la cifra de fallecidos adscritos al servicio de atención a domicilio en un documento oficial. La respuesta a las preguntas formuladas por el grupo socialista fue clara y directa.
"Se informa que fueron 37 las personas usuarias del servicio de teleasistencia a personas en situación de dependencia las que fallecieron a causa de la DANA de octubre 2024", señala el escrito oficial al que tuvieron acceso los medios.
Este servicio está diseñado para atender de forma ininterrumpida a personas declaradas en situación de dependencia en todos los municipios de la Comunitat Valenciana, incluyendo las zonas más afectadas por las trágicas inundaciones.
Protocolo de avisos activado
En su comunicación, Camarero también defendió la actuación del servicio durante la emergencia. Según la vicepresidenta, se transmitieron mensajes de precaución a los usuarios tanto el día previo como durante la jornada de la DANA.
El lunes 28 de octubre, los operadores del servicio de teleasistencia, gestionado por la empresa Atenzia en Valencia y Castellón, incluyeron avisos de precaución en sus comunicaciones. Estos mensajes se basaban en la alerta meteorológica emitida por la AEMET.
Al día siguiente, el martes 29 de octubre, la alerta de la AEMET se elevó a nivel rojo. Desde las 8:30 de la mañana, según la Generalitat, se intensificaron los mensajes de precaución en todas las comunicaciones realizadas con los usuarios a lo largo del día.
El servicio de teleasistencia en cifras
En abril, Susana Camarero informó de un aumento significativo en el número de usuarios del Servicio de Teleasistencia Avanzada. La cifra pasó de 13.817 personas en enero de 2022 a 78.435 en la actualidad, mostrando un crecimiento exponencial en la cobertura del servicio.
Análisis de los registros de llamadas
A pesar de las afirmaciones del Consell, el análisis de los registros de llamadas genera interrogantes. La Conselleria remitió a Les Corts un listado con miles de comunicaciones realizadas durante octubre en Valencia y Castellón.
Cada llamada tiene un epígrafe que resume el motivo. Durante los días 28 y 29 de octubre, los motivos registrados son variados, como "Reaseguramiento emergencia atiende llamada" o "Agenda postemergencia contesta". Sin embargo, ninguno de estos códigos hace una referencia explícita a la DANA o a una alerta meteorológica.
La explicación de la Conselleria
Fuentes de la Conselleria de Servicios Sociales han aclarado esta aparente discrepancia. Explican que los códigos utilizados en los registros son internos de la empresa adjudicataria, Atenzia, y se refieren a circunstancias rutinarias del usuario, como una caída o un recordatorio para tomar medicación.
Según esta versión, los avisos sobre la DANA fueron trasladados verbalmente por los trabajadores de forma adicional durante esas llamadas, sin que quedaran reflejados en los códigos de registro. Por lo tanto, la ausencia del término "DANA" o "alerta" en los epígrafes no significaría que no se dieran los avisos.
Esta situación contrasta con los registros del 30 de octubre, el día después de la catástrofe. En esa jornada, la mayoría de las llamadas aparecen bajo el motivo "Campaña climatológica no contesta" o "Campaña climatológica atiende llamadas". La Conselleria indica que esto se debe a que la empresa reforzó el servicio para contactar con todos los usuarios, realizando más de 372.000 comunicaciones para verificar su estado.
¿Quiénes son los usuarios del servicio?
El Servicio de Teleasistencia Avanzada atiende a personas declaradas en situación de dependencia. Para ser usuario, la persona debe tener capacidad para utilizar el dispositivo y no recibir atención en un centro residencial. La prestación se asigna a través del Programa Individual de Atención (PIA) de cada persona dependiente.
El impacto de la DANA en la población mayor
Los datos de las víctimas de la DANA revelan un patrón trágico: la especial vulnerabilidad de las personas mayores. Este colectivo fue el más golpeado por las inundaciones del 29 de octubre.
Según el Centro de Integración de Datos, más de un centenar de los fallecidos, cerca del 50% del total, tenía 70 años o más. Este dato es especialmente significativo si se considera que este grupo de edad representa solo el 15% de la población total en los 28 municipios donde se encontraron víctimas.
Los lugares de mayor riesgo
El análisis de los fallecimientos también muestra dónde se produjeron la mayoría de las muertes. Los hogares, que deberían ser un lugar seguro, se convirtieron en una trampa mortal para muchos.
- Aproximadamente el 32% de los cuerpos fueron encontrados en viviendas particulares, principalmente en plantas bajas.
- Un 14% de las víctimas falleció en garajes, probablemente al intentar mover sus vehículos.
Estos datos subrayan la rapidez y la fuerza con la que el agua irrumpió en las zonas residenciales, dejando a muchas personas sin posibilidad de reaccionar, especialmente a aquellas con movilidad reducida o que vivían solas.