Guillermo Fernández Vara, una figura clave en la política española y expresidente de la Junta de Extremadura, tuvo una conexión profesional y personal con València mucho antes de su ascenso político. Durante dos años, la ciudad fue su hogar, donde ejerció como médico forense y compartió sus conocimientos como profesor en la Universitat de València, una etapa que marcó el inicio de su carrera.
Este período, entre 1986 y 1988, no solo representó su primer destino laboral tras obtener la plaza en el Cuerpo Nacional de Médicos Forenses, sino que también forjó un afecto duradero por la Comunitat Valenciana, a la que regresaría en múltiples ocasiones a lo largo de su vida.
Puntos Clave
- Guillermo Fernández Vara vivió y trabajó en València de 1986 a 1988.
- Ejerció como médico forense en el Instituto de Medicina Legal de València.
- Fue profesor colaborador en la Facultad de Medicina de la Universitat de València.
- Obtuvo el número uno en su promoción para el Cuerpo Nacional de Médicos Forenses.
- Mantuvo una estrecha relación con la Comunitat Valenciana y con políticos como Ximo Puig.
Los Inicios Profesionales en València
Tras licenciarse en Medicina en la Universidad de Córdoba en 1983, Guillermo Fernández Vara se preparó para las oposiciones al Cuerpo Nacional de Médicos Forenses. Su esfuerzo culminó en 1986, cuando no solo aprobó, sino que lo hizo como el número uno de su promoción, un logro que le abrió las puertas a su primer destino profesional.
La ciudad asignada fue València. Aquí, un joven Fernández Vara, de apenas 28 años, comenzó a ejercer en el Instituto de Medicina Legal. Durante dos años, desempeñó las complejas tareas de un forense, un trabajo que requiere tanto rigor científico como una gran sensibilidad humana. Esta experiencia inicial fue fundamental para su desarrollo profesional antes de dar el salto a la política.
El Rol del Médico Forense
El trabajo de un médico forense es crucial en el sistema judicial. Se encargan de determinar las causas y circunstancias de una muerte en casos de violencia, sospecha de criminalidad o cuando no hay una explicación clara. Su labor, basada en la evidencia científica, es una pieza clave en las investigaciones policiales y los procesos judiciales.
Docencia en la Universitat de València
Paralelamente a su labor en el instituto forense, Fernández Vara también dedicó parte de su tiempo a la enseñanza. Se incorporó como profesor colaborador en la Facultad de Medicina de la Universitat de València, donde impartió asignaturas relacionadas con su especialidad, la medicina legal y forense.
Esta faceta académica le permitió transmitir sus conocimientos a las nuevas generaciones de médicos, combinando la práctica diaria con la teoría universitaria. Su paso por las aulas de una de las universidades más prestigiosas de España consolidó su perfil profesional y amplió su red de contactos en la ciudad.
Un Vínculo Personal y Cultural con la Tierra Valenciana
Los dos años que pasó en València no fueron solo una etapa laboral. Fernández Vara desarrolló un profundo cariño por la ciudad y su cultura. Quienes lo conocieron de esa época o interactuaron con él más tarde destacan que siempre recordaba con afecto su tiempo en la capital del Turia.
Según relatos de personas cercanas, llegó a tener un conocimiento básico del valenciano, que utilizaba para hacer bromas y mostrar su aprecio por la cultura local. Esta inmersión cultural demuestra que su conexión iba más allá de lo meramente profesional.
València como Destino Vacacional
Incluso después de convertirse en una figura política de primer nivel, Guillermo Fernández Vara eligió la Comunitat Valenciana como destino para sus vacaciones en varias ocasiones, demostrando que su vínculo con la región se mantuvo a lo largo de los años.
Esta relación personal con la ciudad se manifestaba en conversaciones con cualquier valenciano con el que se encontraba, a quienes siempre contaba anécdotas de su etapa como forense y profesor. Era una parte de su biografía que recordaba con orgullo y nostalgia.
La Transición a la Política y la Relación con Ximo Puig
Aunque su estancia en València fue eminentemente profesional, es probable que tuviera sus primeros contactos informales con el entorno del partido socialista. Sin embargo, no hay constancia de una militancia activa durante esos años. Su afiliación formal al PSOE se produjo a su regreso a Extremadura en 1988, bajo la influencia de quien sería su mentor político, Juan Carlos Rodríguez Ibarra.
Años más tarde, ya como presidente de Extremadura, su conexión con la Comunitat Valenciana se reactivó a través de la política, especialmente por su buena relación con el expresidente de la Generalitat, Ximo Puig. Ambos compartían una visión de la política desde la periferia, defendiendo los intereses de sus respectivas comunidades autónomas.
"Siempre mantuvimos una buena relación y compartimos 'mucho' porque 'las periferias unían'", reveló Ximo Puig en sus redes sociales, destacando la sintonía entre ambos líderes socialistas.
Una Tribuna Conjunta en Defensa de la Democracia
La colaboración entre Fernández Vara y Puig, junto al expresidente catalán José Montilla, se materializó en una tribuna de opinión publicada en abril de 2024. El artículo fue una respuesta a la carta a la ciudadanía del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la que anunciaba un período de reflexión sobre su continuidad.
En el texto, los tres expresidentes autonómicos hicieron una defensa firme de la democracia española y del respeto en la vida pública. Argumentaron que la hostilidad y los ataques personales en política representaban un peligro para el sistema. Por ello, pidieron a Sánchez que continuara en su cargo, viendo la crisis como una oportunidad para "reconciliar la política con el respeto y la verdad".
Esta colaboración reflejaba no solo una sintonía ideológica, sino también una preocupación compartida por la salud de la democracia, uniendo a tres barones socialistas de diferentes territorios en una causa común.
Legado de una Figura Dialogante
La noticia del fallecimiento de Guillermo Fernández Vara en 2025 conmocionó al panorama político nacional. Fue ampliamente reconocido, incluso por sus adversarios políticos, como una persona de talante dialogante, respetuoso y razonable, cualidades que muchos consideran en riesgo en la política actual.
Su carrera estuvo marcada por una defensa inquebrantable de los intereses de Extremadura, comunidad que presidió en dos etapas (2007-2011 y 2015-2023). Sin embargo, su biografía no puede entenderse completamente sin mirar a sus orígenes profesionales en València, la ciudad que lo acogió y donde un joven médico forense comenzó un camino que lo llevaría a convertirse en una de las figuras más relevantes de la política española reciente.





