La investigación judicial sobre el fraude de cuatro millones de euros a la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Valencia ha recibido una nueva prórroga, marcando seis años de un proceso prácticamente paralizado. La causa, que se instruye en el Juzgado de Instrucción número 18 de Valencia, sigue pendiente de la cooperación judicial internacional, sin que se vislumbre una fecha para la apertura de juicio oral.
Puntos Clave
- La investigación sobre el fraude de 4 millones de euros a la EMT de Valencia se ha prorrogado nuevamente.
- El caso cumple seis años en fase de instrucción sin avances significativos.
- Los retrasos se deben a la lenta tramitación de las comisiones rogatorias enviadas a Hong Kong.
- La exempleada despedida sigue siendo la única investigada, mientras que el dinero no ha sido recuperado.
Un caso complejo que se dilata en el tiempo
En septiembre de 2019, la EMT de Valencia fue víctima de un sofisticado ciberataque conocido como "fraude del CEO". Mediante técnicas de suplantación de identidad, los estafadores convencieron a una empleada del área de administración para que realizara transferencias por un valor total de cuatro millones de euros a cuentas bancarias en Hong Kong. Seis años después, ese dinero sigue sin recuperarse y la investigación judicial apenas ha avanzado.
El Juzgado de Instrucción número 18 de Valencia se ha visto obligado a extender una vez más el plazo de la investigación. La razón principal de este estancamiento es la dependencia de la cooperación judicial con las autoridades de Hong Kong, un proceso que se ha revelado extremadamente lento y burocrático.
El epicentro del retraso: la cooperación internacional
La clave para resolver el caso reside en la información que puedan aportar las autoridades chinas. El juzgado español envió hace años comisiones rogatorias, que son solicitudes formales de ayuda judicial, para obtener datos cruciales. Estas solicitudes buscan identificar a los titulares de las cuentas bancarias que recibieron los fondos y rastrear el destino final del dinero.
Sin embargo, la respuesta de Hong Kong ha sido lenta y, en ocasiones, insuficiente. Esta demora ha mantenido la causa en un estado de suspensión, impidiendo que el juez instructor pueda tomar decisiones fundamentales, como archivar el caso o proceder a la apertura de juicio oral.
Cronología de un fraude millonario
- Septiembre 2019: Se produce el fraude. Se realizan ocho transferencias a cuentas en Hong Kong por un total de 4 millones de euros.
- Finales de 2019: Se inicia la investigación judicial y la EMT despide a la empleada implicada.
- 2020-2025: El juzgado envía comisiones rogatorias a Hong Kong y la investigación se prorroga sucesivamente a la espera de respuestas.
- Septiembre 2025: El caso cumple seis años estancado y se aprueba una nueva prórroga de la instrucción.
La situación de la única investigada
Desde el inicio del proceso, la única persona que figura como investigada es la exempleada del departamento de administración que autorizó las transferencias. La trabajadora fue despedida por la EMT poco después de que se descubriera el fraude, una decisión que fue declarada procedente por los tribunales.
La defensa de la exempleada ha sostenido siempre que fue víctima de un engaño muy elaborado y que actuó siguiendo los protocolos que creía legítimos. Su situación procesal sigue sin definirse a la espera de que la investigación pueda determinar si tuvo alguna responsabilidad penal o si, por el contrario, fue simplemente un instrumento en la estafa.
La falta de avances mantiene en un limbo legal a la única persona investigada en la causa, cuya responsabilidad penal no ha podido ser ni confirmada ni descartada tras seis años de proceso.
Las consecuencias para la EMT
El fraude supuso un duro golpe financiero para la empresa pública. Los cuatro millones de euros representaban una parte significativa de su presupuesto. Aunque la compañía activó todos los mecanismos legales para intentar recuperar los fondos, hasta la fecha no se ha conseguido reintegrar ni un solo euro a las arcas municipales.
El caso también obligó a la EMT a revisar y reforzar todos sus protocolos de seguridad internos para prevenir futuros ciberataques. Se implementaron medidas de doble verificación y se mejoró la formación de los empleados para identificar intentos de phishing y otras técnicas de ingeniería social.
¿Qué es el "fraude del CEO"?
El "fraude del CEO" es un tipo de ciberestafa en la que los delincuentes suplantan la identidad de un alto directivo de una empresa (como el Consejero Delegado o CEO) para engañar a un empleado con acceso a las finanzas. A través de correos electrónicos o llamadas falsas, le ordenan realizar transferencias bancarias urgentes y confidenciales a cuentas controladas por los estafadores.
Un futuro incierto para la investigación
Con esta nueva prórroga, el futuro de la investigación sigue siendo incierto. La paciencia de las partes implicadas se agota mientras el tiempo juega a favor de los autores del fraude, que continúan sin ser identificados. La resolución del caso depende casi exclusivamente de una colaboración internacional que, hasta ahora, ha sido ineficaz.
Mientras tanto, las preguntas fundamentales siguen sin respuesta: ¿Quiénes fueron los verdaderos cerebros detrás de la estafa? ¿Dónde están los cuatro millones de euros? Seis años después, la justicia en Valencia sigue esperando una respuesta que debe llegar desde el otro lado del mundo.