La Generalitat Valenciana ha iniciado el proceso para adjudicar 123 viviendas de alquiler asequible en el barrio de La Torre de Valencia, con una reserva del 50% de las mismas para jóvenes menores de 35 años. Esta iniciativa busca facilitar la emancipación y el acceso a una vivienda digna a precios que oscilan entre los 292 y los 506 euros mensuales.
El edificio, ubicado en la calle Remigio Soler, fue rehabilitado tras sufrir graves daños por una DANA, con una inversión de 2,2 millones de euros. Ahora, las viviendas disponibles se asignarán a colectivos prioritarios para fomentar la integración social y evitar la creación de guetos urbanos, según ha informado la administración autonómica.
Puntos Clave
- Viviendas disponibles: Se adjudicarán 123 pisos en el barrio de La Torre.
- Prioridad para jóvenes: La mitad de las viviendas (aproximadamente 62) están reservadas para personas menores de 35 años.
- Precios asequibles: Los alquileres mensuales, con gastos de comunidad incluidos, varían entre 292 y 506 euros.
- Otros colectivos: El resto de los pisos se destinará a mayores de 60 años, familias numerosas, monoparentales y personas con discapacidad, entre otros.
- Requisito de ingresos: Los solicitantes deben demostrar ingresos suficientes para que el alquiler no supere el 25% de sus rentas.
Un edificio recuperado para fines sociales
El inmueble, que cuenta con un total de 184 viviendas, vio interrumpido su proceso de adjudicación inicial debido a los graves daños causados por una DANA justo al finalizar su construcción. Las inundaciones afectaron principalmente a los bajos, las zonas comunes y los sótanos, lo que obligó a una intervención urgente.
Sebastián Fernández, secretario autonómico de Vivienda, explicó que "tras una inversión de 2,2 millones de euros en trabajos de reacondicionamiento, se han ido entregando viviendas en distintas fases". Parte del edificio se utilizó para acoger temporalmente a familias afectadas por la riada cuyos hogares quedaron inhabitables.
Contexto: El impacto de la DANA
El edificio de La Torre fue finalizado justo antes de que una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) afectara gravemente la zona. Este fenómeno meteorológico provocó inundaciones que hicieron necesaria una costosa rehabilitación antes de que las viviendas pudieran ser habitadas de forma segura, retrasando el plan original de adjudicación.
Actualmente, 61 de las 184 viviendas del edificio continúan ocupadas por familias damnificadas que aún no han podido regresar a sus casas. La Generalitat les ofreció contratos de seis meses, prorrogables por otros seis. De estas familias, 14 han formalizado un contrato de alquiler definitivo en el mismo edificio.
Criterios de adjudicación para la inclusión social
La Vicepresidencia, a través de la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (EVha), ha establecido un sistema de adjudicación excepcional para las 123 viviendas restantes. El objetivo es claro: fomentar una mayor heterogeneidad social en el edificio y evitar la concentración de colectivos en riesgo de exclusión.
Fernández destacó que la medida busca "contrarrestar las dinámicas de segregación urbana y guetización que se dan en algunos grupos de vivienda pública, favoreciendo medidas orientadas a promover un mayor equilibrio de la población residente".
"Continuamos con nuestro apoyo a las personas más vulnerables, al tiempo que buscamos contrarrestar las dinámicas de segregación urbana y guetización", afirmó Sebastián Fernández, secretario autonómico de Vivienda.
Distribución de las viviendas
La asignación de las viviendas se ha estructurado para dar respuesta a las necesidades de diferentes grupos sociales con dificultades de acceso al mercado inmobiliario:
- Jóvenes menores de 35 años: Se les reserva el 50% de las viviendas disponibles. La Generalitat busca ofrecer una respuesta inmediata a las dificultades de emancipación de este colectivo.
- Mayores de 60 años: Se prioriza a este grupo para fomentar la integración intergeneracional y aprovechar su experiencia como un activo para la comunidad.
- Otros colectivos vulnerables: El resto de los pisos se adjudicará a familias con personas con discapacidad, familias numerosas, monoparentales y víctimas de violencia de género.
Requisitos y características de las viviendas
Para poder optar a una de estas viviendas, las unidades de convivencia interesadas deben cumplir una serie de condiciones. El primer paso es estar inscrito en el Registro de Demanda de Vivienda de la Comunidad Valenciana y cumplir con los requisitos generales para ser adjudicatario de una vivienda pública.
Requisito económico clave
Un criterio fundamental es la solvencia económica. Las familias adjudicatarias deberán justificar unos ingresos mínimos que garanticen que el pago del alquiler y los gastos de comunidad no supere el 25% de sus ingresos totales. Esto asegura la sostenibilidad de los alquileres a largo plazo.
Además, la Generalitat ha establecido que en futuras promociones públicas y en la adquisición de nuevas viviendas para ampliar el parque público, se mantendrá la prioridad de oferta para jóvenes con ingresos derivados del trabajo.
Detalles de los inmuebles
Las 123 viviendas que ahora se adjudican presentan diferentes tipologías para adaptarse a las necesidades de distintas unidades familiares. Las características son las siguientes:
- Superficie: Los pisos tienen una superficie que varía entre los 48 y los 89 metros cuadrados.
- Dormitorios: Hay viviendas de 1, 2 y 3 dormitorios.
- Renta mensual: El precio del alquiler, que ya incluye los gastos de comunidad, se sitúa en una horquilla de 292 euros para las más pequeñas hasta 506 euros para las de mayor tamaño.
Esta iniciativa representa un esfuerzo de la administración para ampliar la oferta de vivienda pública asequible en Valencia, con un enfoque particular en facilitar la independencia de los jóvenes y promover un modelo de convivencia más diverso e integrado.





