Anecoop, la cooperativa hortofrutícola valenciana, celebra su 50 aniversario consolidada como un gigante europeo en la exportación de frutas y hortalizas. Fundada en 1975, la empresa ha superado los 1.000 millones de euros en facturación y es reconocida por innovaciones que cambiaron el mercado, como la sandía sin pepitas 'Bouquet' y el caqui 'Persimon'.
En un sector tradicionalmente fragmentado, Anecoop ha demostrado la fortaleza del modelo cooperativo, uniendo a miles de agricultores para competir en los mercados internacionales más exigentes. Su historia es un reflejo de la evolución del sector agroalimentario español en las últimas cinco décadas.
Puntos Clave
- Fundación y Visión: Nació en 1975 de la unión de 30 cooperativas citrícolas para exportar a Europa del Este y acceder a grandes supermercados.
- Innovaciones de Éxito: Introdujo la sandía sin pepitas 'Bouquet' y el caqui duro 'Persimon', dos productos que revolucionaron el consumo.
- Crecimiento Sostenido: La facturación del grupo superó los 1.126 millones de euros en la última campaña, un 12,5% más que el año anterior.
- Modelo de Futuro: La estrategia actual se centra en la concentración de cooperativas para ganar rentabilidad y en la expansión de su presencia en Europa.
El origen de un gigante agroalimentario
En 1975, en un contexto de profundos cambios en España, una treintena de líderes de cooperativas citrícolas de Valencia y Castellón tomaron una decisión estratégica. Liderados por Salvador Roig, de Copal (Algemesí), fundaron Anecoop, una cooperativa de segundo grado diseñada para sumar fuerzas.
El objetivo era claro: conseguir la capacidad comercial y logística necesaria para vender naranjas y mandarinas a las grandes cadenas de supermercados de Europa. Desde el principio, tuvieron la visión de que el futuro del sector pasaba por la gran distribución, un enfoque pionero en aquella época.
Un mercado por conquistar
Los primeros esfuerzos comerciales se dirigieron a países del Este de Europa, como la Unión Soviética, Hungría o Checoslovaquia. Anecoop también logró establecer relaciones con gigantes de la distribución como la cadena alemana EDEKA, demostrando que la unión de pequeños productores podía competir al más alto nivel.
Figuras como José María Planells, director general durante 35 años, y los presidentes Manuel Romero y Pepe Miquel, fueron clave en la consolidación de este modelo. "Necesitaban concentrar oferta para poder acceder a grandes contratos", explica Joan Mir, actual director general de Anecoop.
Innovación que llega a la mesa
Si hay dos productos que definen el éxito innovador de Anecoop, son la sandía sin pepitas y el caqui de pulpa dura. Antes de su llegada, comer sandía implicaba lidiar con las pepitas, y el caqui era una fruta delicada y de consumo limitado.
Anecoop, en colaboración con la empresa norteamericana Petoseed (hoy parte de Bayer), introdujo la marca 'Bouquet', que popularizó la sandía sin pepitas en todo el mundo. Este hito transformó un producto estacional en un éxito de ventas global.
De manera similar, la marca 'Persimon' revolucionó el mercado del caqui. Lograron comercializar una variedad que se puede consumir con una textura firme, similar a la de una manzana, abriendo nuevas oportunidades comerciales para un cultivo tradicional.
Un modelo de éxito estudiado
El modelo cooperativo de Anecoop ha sido tan eficaz que, según su director general, Joan Mir, grandes empresas del sector han intentado replicarlo. "Nos copian nuestro modelo cooperativo", afirma, destacando la capacidad de la firma para generar valor para sus socios agricultores.
Estructura y expansión internacional
Lo que comenzó como una unión de cooperativas citrícolas es hoy una estructura diversificada que abarca frutas, hortalizas, vinos y productos de quinta gama (listos para consumir). Anecoop agrupa a 61 cooperativas socias, que representan a unos 20.000 agricultores.
Estos agricultores cultivan más de 61.000 hectáreas en 13 provincias españolas, lo que garantiza una amplia variedad de productos y un calendario de oferta extendido.
Presencia global
La vocación internacional de Anecoop se manifestó pronto. En 1979, abrió su primera filial en Perpiñán (Francia) para estar más cerca de sus clientes europeos. Esta estrategia continuó con la apertura de sedes en Polonia (1991) y la República Checa (1997).
"Sin duda, Europa ha cambiado, y nos hemos adaptado a los nuevos tiempos con la búsqueda de nuevos mercados", puntualiza Joan Mir.
La empresa también ha enfrentado desafíos geopolíticos, como el veto ruso de 2014 y la guerra en Ucrania, que paralizó su actividad en Rusia, Bielorrusia y Ucrania. A pesar de ello, la cooperativa ha sabido reorientar sus exportaciones y mantener su crecimiento.
El futuro: concentración y sostenibilidad
Con una facturación que ya supera los 1.100 millones de euros y una cuota del 5,04% en la exportación nacional de frutas y hortalizas, Anecoop mira hacia el futuro con objetivos claros. Alejandro Monzón, su actual presidente, destaca la necesidad de seguir profesionalizando el sector.
La estrategia a futuro se basa en varios pilares:
- Concentración: Fomentar la unión de cooperativas para crear entidades más grandes, eficientes y rentables que puedan ofrecer mejores liquidaciones a los agricultores.
- I+D+i: Impulsar la investigación para mejorar procesos, ampliar los calendarios de producción de frutas como la sandía y ajustar la oferta a la demanda del mercado.
- Calidad y Seguridad: Implementar sistemas de control como el HACCP (Análisis de Peligros y Puntos de Control Crítico) para garantizar la máxima seguridad alimentaria.
- Expansión en Europa: Continuar el crecimiento en su mercado principal. Recientemente, han adquirido una empresa del sector de las flores en Francia, demostrando su interés en diversificar su negocio.
Cincuenta años después de su fundación, Anecoop no solo ha logrado sus objetivos iniciales, sino que se ha convertido en un referente de cómo la cooperación, la visión a largo plazo y la innovación pueden transformar un sector tradicional y llevarlo a liderar el mercado mundial.





